Yoga y Meditación
Desde Kevala Psicología, todas las prácticas que ofrecemos de yoga (hatha, vinyasa y yin yoga) y meditación son sensibles al trauma. Esto quiere decir que tenemos en cuenta el estado de nuestro sistema nervioso para guiar la sesión y ofrecemos las alternativas posibles en cada postura o movimiento, para que la práctica sea lo más segura posible.
La práctica de yoga se ha ido diversificando a lo largo del tiempo, perdiendo, en muchas ocasiones, su esencia, su filosofía y su origen. Desde Kevala Psicología, intentamos mantener los orígenes del yoga adecuándonos a nuestro contexto actual. Tendemos a relacionar yoga con la práctica en movimiento de diferentes posturas, cuando el yoga es mucho más que eso. Implica poner nuestra atención, estar plenamente conscientes no solo en el movimiento (que es la puerta de entrada a nuestro cuerpo), sino progresivamente en nuestra respiración y en nuestro mundo interno (por ejemplo, a través de prácticas de pranayama y de meditación).
Así, entendemos el yoga y la meditación como el camino de vuelta a casa: nuestro cuerpo, nuestro mundo interno. Teniendo presente, en todo momento, la sensibilidad al trauma, adaptando las prácticas a cada persona y no al revés.
Desde Kevala Psicología, ofrecemos tres estilos de yoga que se diferencian entre ellos, en cierta manera, en el dinamismo de la práctica, aunque mantienen la esencia del Yoga. Independientemente del estilo y buscando que el yoga se adapte a cada persona, utilizamos diferentes soportes durante las sesiones (cojines, mantas, cinturones, sillas). Cada práctica incluye toma de conciencia (meditación), pranayama (técnicas de respiración), asanas (parte física) y relajación, ofreciendo así un yoga integral.
Hatha yoga
Hatha yoga, en sánscrito, significa disciplina de fuerza, que busca el equilibrio en nuestro sistema nervioso a través de movimientos conscientes, diferentes posturas (asana) y la consciencia de nuestro cuerpo y nuestra respiración. Esta intención equilibrante del hatha yoga ya se expresa en su propia denominación: “ha” significa sol, representando la energía más activa (sistema nervioso simpático), y “tha” significa luna, relacionándose con el descanso (sistema nervioso parasimpático).
Durante las prácticas de hatha yoga, a través de partes más dinámicas y partes más pausadas, vamos equilibrando nuestra energía, nuestro sistema nervioso. Además, la consciencia corporal que vamos cultivando en cada práctica nos permite ser cada vez más conscientes de nuestro mundo interno, nuestras emociones y pensamientos.
Del Hatha yoga parten otros estilos como Vinyasa y Yin yoga.
Vinyasa yoga
Vinyasa yoga suele traducirse como la unión del movimiento y la respiración, diferenciándose de otros estilos de yoga en que su práctica es más dinámica y fluida.
Durante toda la práctica se enlazan unas posturas (asana) con otras de manera dinámica y toda la secuencia se realiza en completa coordinación con una respiración consciente.
En esta práctica, meditamos en movimiento y fluimos de una postura a otra. Se trabaja a través de diferentes secuencias, con diferentes opciones para cada postura y con posibilidad de un diseño de sesión específico para cada practicante, de forma que sea la práctica la que se adapte a cada persona y no al contrario.
Yin yoga
Es un estilo de yoga estático, basado en la medicina tradicional china. Nos permite trabajar con los tejidos más profundos de nuestro cuerpo, los tejidos conectivos.
Actúa sobre las fascias del cuerpo, relajándolas y flexibilizándolas, además de ir dando espacio para regular nuestro sistema nervioso. Durante la práctica, nos sumergimos en posturas pasivas que pueden oscilar de 3 a 5 minutos, acomodándonos en ellas sin esfuerzo, con apoyo de soportes como cojines o mantas.
Meditación
Hay muchas ideas erróneas en relación a la meditación como, por ejemplo, que supone dejar la mente en blanco o que su objetivo es relajarnos y reducir nuestro estrés. La meditación es una toma de conciencia con nuestro cuerpo y nuestra mente. Es un parar y observar lo que está sucediendo aquí y ahora, tanto en el mundo externo como en nuestro mundo interno, resulte agradable o desagradable. Se puede meditar en quietud y en movimiento, y existen múltiples prácticas posibles.
La meditación (y el yoga) tiene múltiples beneficios para nuestra salud física y mental, influyendo directamente en todos nuestros sistemas (nervioso, digestivo, inmune, respiratorio, hormonal), regulándolos. No obstante, la práctica de meditación también implica algunos riesgos como hacernos conscientes de experiencias que estaban en un plano inconsciente. Esto puede desregularnos emocionalmente sin que, quizás, sepamos cómo acompañarnos en ese momento.
Por ese motivo, desde Kevala Psicología, guiamos prácticas sensibles al trauma: aproximándonos de manera gradual al momento presente, a través de todos nuestros sentidos, del movimiento y, finalmente, de la quietud. Permitiendo que nuestra atención vaya transitando por diferentes focos, iniciándonos en aquellos más neutros (notar el contacto de los pies con el suelo, por ejemplo) y ampliando, a nuestro ritmo y siempre con una guía sensible al trauma, hacia otros focos más complejas (por ejemplo, observar nuestros pensamientos).
HORARIOS
Lunes
Hatha Yoga
19:00 pm
Martes
Vinyasa/Yin Yoga
20:00 pm
Miércoles
Hatha Yoga
11:00 am
Viernes
Meditación
8:00 am
Vinyasa/Yin Yoga
9:00 am
Sábado
Vinyasa/Yin Yoga
11:00 am
PRECIOS
1 Sesión / Semana
60€ al mes
2 Sesiones / Semana
90€ al mes
3 Sesiones / Semana
120€ al mes
Sesiones Meditación
60€ al mes
Sesiones Privadas
50€ / 75 min